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Bailarina denuncia acoso sexual en concurso de huapango en Hidalgo

Amiyaleth Gutiérrez, integrante de un ballet folclórico, denunció que fue víctima de acoso sexual durante el XXXV Concurso Nacional de Huapango Huasteco en Jacala de Ledezma, Hidalgo. El incidente ocurrió en noviembre de 2024, cuando compartió alojamiento con su compañero de baile, Martín P. F., en la casa de una anfitriona local. La joven decidió romper el silencio tras participar en su primera marcha del Día Internacional de la Mujer o en su abreviación 8M.
El relato del acoso sexual
Amiyaleth Gutiérrez relató que, después de su presentación, regresó al cuarto donde se hospedaba con su compañero. Durante la madrugada, él insistió en cambiar de cama alegando incomodidad, a lo que ella accedió. Horas más tarde, en la madrugada, despertó al sentir que Martín la tocaba sin su consentimiento.
“Me desperté por sentir algo extraño, y así fue, era Martín tocándome todo mi cuerpo mientras yo estaba dormida, en ese momento me llené de miedo y no supe qué hacer, entré en shock”, compartió en redes sociales.
La bailarina Amiyaleth Gutiérrez explicó que, por su miedo a una confrontación directa, actuó con calma y evitó defenderse. La llegada de su amiga y su abuela le permitió alejarse del agresor sin generar sospechas.
“Hasta que él se iba a sobrepasar aún más y fue cuando reaccioné y le dije que por favor no hiciera eso, a lo que él incluso respondió “entonces qué si?” ,pensé que lo mejor sería actuar tranquila y no ponerme a la defensiva con él porque solo estábamos él y yo y no sabía lo que él podía hacer”, dijo.
Las disculpas del agresor
Pese a la agresión, Amiyaleth Gutiérrez continuó bailando con su compañero Martín, durante el concurso, para evitar conflictos. Posteriormente a esto, recibió mensajes de disculpa de su compañero, los cuales compartió en su publicación.
“Fue sin mi consentimiento, apenas me atreví a hablar de esto, pero es mejor hacerlo para que no le pase a nadie más”, escribió.
La joven explicó que el miedo y la confusión fue lo que le impidió denunciar mucho antes, pero decidió hacerlo público para visibilizar el problema y exigir espacios seguros dentro del mundo de la danza.
La denuncia de acoso sexual por parte de la bailarina, Amiyaleth Gutiérrez generó un importante debate sobre la seguridad de las mujeres en eventos culturales y deportivos. Su valentía al compartir su experiencia tiene el propósito de prevenir que otras mujeres pasen por situaciones similares y al mismo tiempo fomentar la creación de protocolos contra el acoso en el ámbito artístico.