Los trabajadores de Audi México han rechazado un aumento salarial del 7% y optan por mantenerse en huelga, marcando un impasse en las negociaciones laborales. Con más de 3.000 votos en contra de la propuesta de la armadora alemana, el sindicato ha dejado claro su descontento y su voluntad de seguir luchando por un incremento salarial mayor, al menos del 10%.

La votación, que se llevó a cabo después de una jornada extensa, reflejó un contundente rechazo por parte de los trabajadores, con un 83% de votos en contra del aumento propuesto. A pesar de los esfuerzos de la empresa por ofrecer garantías y beneficios adicionales, como la extensión de contratos para empleados eventuales, la oferta no convenció a la mayoría.

El sindicato ha anunciado su determinación de continuar con la huelga hasta lograr un incremento del 15% en los salarios, argumentando una brecha salarial significativa en comparación con otras armadoras en el país. Esta decisión refleja la firmeza y unidad de los trabajadores en la búsqueda de condiciones laborales más justas y equitativas.

El conflicto, que ha generado pérdidas millonarias para la compañía y preocupación en el sector automotriz estatal, parece estar lejos de resolverse. Mientras los trabajadores mantienen su postura en defensa de sus derechos, los representantes empresariales advierten sobre las consecuencias económicas y laborales de prolongar la huelga.

En medio de este escenario tenso, la sociedad observa con atención el desenlace de este conflicto, consciente de su impacto en la economía local y en la estabilidad laboral de miles de trabajadores. La necesidad de encontrar un punto de acuerdo que satisfaga ambas partes se vuelve cada vez más urgente, en aras de evitar mayores repercusiones para todos los involucrados en esta disputa laboral.