La Audiencia de Barcelona ha emitido una sentencia condenatoria contra el futbolista Dani Alves, imponiéndole una pena de cuatro años y medio de cárcel por el delito de agresión sexual. La condena surge a raíz de un incidente ocurrido la noche del 30 de diciembre de 2022, cuando Alves presuntamente violó a una joven en el baño de un reservado de la discoteca Sutton en Barcelona, forzando su voluntad «con uso de la violencia».

La sentencia, comunicada este jueves por la mañana, establece además cinco años de libertad vigilada para Alves, así como nueve años de alejamiento de la víctima. Asimismo, se ordena una indemnización de 150 mil euros a la joven agredida.

Durante el juicio, que tuvo lugar entre el 5 y el 7 de febrero pasados, la Fiscalía solicitó una pena de nueve años de cárcel para el futbolista, mientras que la acusación particular demandó una condena de 12 años.

El tribunal concluyó que quedó demostrado que Dani Alves abordó violentamente a la víctima, la arrojó al suelo y la violó, a pesar de sus negativas y su deseo de irse. La Audiencia subrayó que, para establecer la existencia de agresión sexual, no es necesario que la víctima presente lesiones físicas ni que haya resistido de manera heroica.

La sentencia recalca la gravedad del delito cometido por el futbolista y la necesidad de aplicar una condena proporcional al daño causado a la víctima. Además, se reconoce la atenuante de reparación del daño, aunque ello no ha sido suficiente para reducir significativamente la pena impuesta.

La resolución judicial ha generado un gran impacto en la opinión pública y en el ámbito del deporte, avivando el debate sobre la responsabilidad y el comportamiento de las figuras públicas, así como sobre la importancia de la protección de los derechos de las víctimas de agresión sexual.