Desde la emblemática Plaza de la Constitución de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, candidata de la coalición Sigamos haciendo historia, dio inicio este viernes 1 de marzo a su campaña por la presidencia de México en un evento que congregó a miles de simpatizantes.

Ante una multitud entusiasta que llenó por completo el Zócalo capitalino, Sheinbaum Pardo presentó su proyecto de nación y plataforma electoral, marcando así el inicio de una contienda electoral crucial para el futuro del país.

En su discurso inaugural, la candidata destacó la importancia de la elección del 2 de junio, calificándola como una decisión histórica para México. «El pueblo de México tendrá que elegir entre dos caminos: uno que continúe con la transformación iniciada o uno que perpetúe la corrupción», afirmó Sheinbaum ante la efusiva respuesta de los presentes.

Enfatizó los logros alcanzados durante la actual administración, señalando la creación de empleos y la reducción de la pobreza como ejemplos tangibles de los beneficios de un gobierno honesto y comprometido con el bienestar de la población.

«En estos seis años hemos avanzado mucho, pero aún queda trabajo por hacer. ¿Vamos a permitir el retorno de los privilegios y la corrupción?», preguntó a la multitud, que respondió con un rotundo «¡No!».

Sheinbaum reafirmó su compromiso con la Cuarta Transformación, describiéndola como la construcción de un futuro próspero y justo para las generaciones presentes y futuras. Acto seguido, anunció la presentación de sus cien compromisos de gobierno, detallando las acciones que llevará a cabo para seguir transformando al país.

El evento también contó con la participación de Clara Brugada, candidata de la alianza de Morena, PT y PVEM a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Brugada destacó los logros de los gobiernos de izquierda en la capital y afirmó que el llamado «cártel inmobiliario» no volverá a tener influencia en la ciudad.

Antes de ceder el micrófono a Sheinbaum, Brugada cerró su intervención con un llamado a la unidad y proclamó: «Es tiempo de mujeres».